La empresa pública Tragsa, participada mayoritariamente por la SEPI y dependiente del Ministerio de Hacienda, ha convocado a la Comunidad de Madrid y al comité de empresa de las Brigadas Forestales a una reunión tripartita en Leganés el próximo jueves 28 de agosto. El objetivo de la reunión es abordar el conflicto laboral que ha llevado a estos trabajadores a mantenerse en huelga.
Los brigadistas denuncian precariedad, temporalidad y falta de actualización de su convenio, que no se ha revisado desde 2008. Entre sus demandas se incluye la actualización de salarios congelados desde 2010, el fin de la eventualidad que afecta al 40% de la plantilla, y el reconocimiento de la peligrosidad y toxicidad de sus funciones.
En cuanto al convenio de las BRIF estatales, se ha planteado la posibilidad de que los efectivos de la Comunidad se acojan al convenio recién publicado en el BOE para las Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales. Sin embargo, el comité rechaza esta propuesta argumentando que son servicios distintos y que la adhesión crearía más inseguridad jurídica.
La Consejería de Medio Ambiente defiende esta alternativa como legal y bien valorada por diversos ministerios, ya que permitiría homogeneizar las condiciones de trabajo entre quienes realizan las mismas funciones.
Por otro lado, la Comunidad de Madrid ha confirmado la renovación del contrato a Tragsa para labores de prevención, vigilancia y apoyo en la extinción de incendios forestales. Este nuevo acuerdo, que entrará en vigor en 2026, contempla un incremento presupuestario de 4 millones de euros, superando los 32 millones anuales, y prevé que los trabajadores puedan ser contratados durante todo el año.
Además, la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112 entregará al comité un plan de mejora de las bases e infraestructuras, con el objetivo de reforzar la prevención y contar con un operativo más estable y profesionalizado.
El encuentro del próximo jueves será la primera reunión a tres bandas tras meses de desencuentros y acusaciones cruzadas. El comité mantiene su postura de no desconvocar la huelga hasta que no se logren avances claros en las negociaciones.
