Las redadas de cocaína aumentaron un 56% respecto a 2023, incautándose un total de 6.355 kilogramos de esta sustancia
Agentes de la Guardia Civil lograron interceptar un total de 6.784 kilogramos de sustancias estupefacientes a lo largo de 2024, que iban a ser introducidas en nuestro país a través del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, informó este viernes la Comandancia de Madrid en una nota de prensa.
Las operaciones llevadas a cabo por la Unidad Fiscal y de Fronteras de la Comandancia de la Guardia Civil en Madrid permitieron la detención de 149 personas que intentaban introducir distintas drogas utilizando distintos métodos de ocultación.
Según el tipo de sustancia, destacan los 6.355 kilogramos de cocaína, la mayoría de los cuales estaban escondidos en dobles fondos en equipajes, ropa o elementos decorativos, aunque se registró un ligero aumento en las detenciones de personas que viajaban con la droga adherida al cuerpo, denominada en jerga como fajeros.
La mayoría de estas detenciones están inmersas en el plan de análisis de pasajeros y equipajes desarrollado por la Guardia Civil en el aeropuerto de Madrid.
Entre las intervenciones realizadas por peritos de la Unidad Fiscal y de Frontera destacan los 650 kilogramos de cocaína que estaban escondidos en el café, lo que llevó a la detención de once personas.
En las detenciones practicadas por delitos contra la salud pública, el más joven detenido por intento de contrabando de drogas fue un menor de edad que viajaba con ocho kilogramos de cocaína escondidos en su equipaje procedente de Colombia. En el polo opuesto de edad, un hombre peruano de 78 años fue detenido con 48 kilogramos de cocaína en su equipaje facturado.
Por otro lado, también hubo otras intervenciones sobre sustancias ilegales, destacando los 298 kilogramos de MDMA cuyo principal destino era México. Pero también se incautaron 57.380 gramos de marihuana, 36.460 gramos de ayahuasca y 37.220 gramos de khat.
Marihuana y ayahuasca fueron incautadas especialmente durante el control de paquetería que la Guardia Civil instauró en el aeropuerto de Barajas, donde, además, se constata la intervención de 785.073 dosis de fármacos, la mayoría destinados a la disfunción eréctil.