texto a analizar.
2. Elimina cualquier formato no deseado, como etiquetas HTML o caracteres especiales.
3. Divide el texto en oraciones o párrafos para facilitar su análisis.
4. Elimina cualquier información irrelevante o redundante que no aporte al análisis.
5. Verifica la ortografía y gramática del texto para asegurarte de que esté correctamente escrito.
6. Guarda el texto limpio en un archivo separado para su análisis posterior.
