El compromiso del Ayuntamiento de Madrid con el medio ambiente y la sostenibilidad se refleja en una serie de acciones concretas para proteger, recuperar y fomentar la biodiversidad urbana en la ciudad. Desde el año 2022, se han realizado 48 intervenciones focalizadas en diferentes parques y áreas verdes, dando lugar a la plantación de 1.147 nuevos árboles y más de 11.400 arbustos.
Estas acciones, coordinadas por el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad bajo la dirección de Borja Carabante, forman parte del Plan de Fomento y Gestión de la Biodiversidad. Este plan tiene como objetivo restaurar el equilibrio ecológico, mitigar los efectos del cambio climático y mejorar la salud ambiental de Madrid en su totalidad.
Recientemente, el delegado Borja Carabante y el concejal Carlos Izquierdo visitaron el parque de la Emperatriz María de Austria en Carabanchel, donde se han integrado nuevas plantaciones, charcas y estructuras para la fauna. Carabante destacó que estas acciones no solo embellecen los espacios públicos, sino que también nos reconectan con la naturaleza en el corazón de la ciudad. Además, resaltó que invertir en biodiversidad es apostar por la salud, la sostenibilidad y el futuro de todos los ciudadanos.
El parque de la Emperatriz María de Austria ha sido seleccionado como escenario para un proyecto piloto enfocado en la biodiversidad. Mediante diversas acciones de naturalización y restauración ecológica en una isleta degradada dentro del lago del parque, se ha buscado transformar este espacio en un refugio para la fauna y la flora local. Se han creado muros de biodiversidad, se han plantado especies vegetales beneficiosas para polinizadores, se ha construido una charca para anfibios y se ha establecido una pradera seca mediterránea para atraer lagartijas y aves.
Además, se han implementado mejoras en el entorno de la laguna, como la instalación de cajas nido y comederos para diversas especies. Estas acciones han tenido resultados positivos, con el registro de 204 aves de 26 especies diferentes, 36 mariposas de ocho variedades y 109 polinizadores, incluyendo 76 abejas, lo que demuestra el impacto positivo del proyecto en la biodiversidad local.
La infraestructura verde, que incluye mariposarios, cajas nido, charcas temporales, estanques de retención de agua y muros de piedra seca, se ha convertido en refugios ecológicos en la ciudad. Estas medidas están diseñadas para atraer polinizadores, facilitar la presencia de fauna auxiliar y fomentar la resiliencia natural del entorno urbano.
En conjunto, estas iniciativas forman parte de una estrategia a largo plazo para hacer de Madrid una ciudad más verde, saludable y conectada con la naturaleza. El objetivo final es crear una red de infraestructura verde que permita el movimiento de especies y la regeneración natural del entorno, preparando a la ciudad para un futuro más sostenible y habitable.
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